
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, es conocido por sus frecuentes intervenciones de enfrentamientos con los gobiernos del PP, en la mayoría de los casos, con prontitud y acierto. Ha demostrado, por ejemplo, su eficiencia en los momentos más duros de la DANA, consiguiendo reparar con rapidez y garantías las principales vías de comunicación destruidas por la catástrofe climática, pero a veces sus necesidades vitales le llevan a ser incoherente.
Si el Ministro Óscar Puente hubiera actuado de la misma manera que en Madrid, probablemente se hubiera cargado de razones para intervenir o no a continuación.
Es el caso actual sobre la gratuidad de menores en los transportes públicos en Andalucía. No se entiende como el ministerio “avisa” en primera instancia a la Comunidad de Madrid y “actúa” con celeridad retirando la subvención en Andalucía. ¿A qué se debe esa diferenciación? Si la razón se encuentra en cuestiones electorales, mal asunto, le ha hecho un flaco favor a su correligionaria. Si hubiera actuado de la misma manera que en Madrid, probablemente se hubiera cargado de razones para actuar o no a continuación.
¿Por qué tienen que pagar los 600.000 menores andaluces las cuitas entre el gobierno central y el andaluz?
Y sobre todo ¿por qué tienen que pagar los 600.000 menores andaluces las cuitas entre el gobierno central y el andaluz? Pida rectificaciones, provoque que cambie el relato el gobierno andaluz, pero no tome decisiones, que perjudican a los que no tienen culpa, mientras en otros casos, tan flagrantes como este, consigue un resultado apetecido y además sabiendo que al final la subvención va a llegar, porque otra cosa tendría poca explicación.
Es evidente que una buena parte de este desaguisado está en las decisiones del gobierno de la derecha andaluza. Son continuas las acciones de Moreno Bonilla y de su gobierno que se caracteriza por hacer oposición al gobierno de coalición progresista, han devuelto dinero de las escuelas infantiles, no han invertido cientos de millones de euros que han llegado al gobierno andaluz para programas públicos de empleo, para sanidad y educación.
Han trasladado fondos estatales a la privatización de los servicios públicos de Andalucía y a la vez han dejado de recaudar varios cientos de millones en impuestos para los más ricos, pidiendo, a continuación, que se le pague la deuda de la comunidad y sobre todo acaban de rechazar 19.000 millones de euros de condonación de la deuda con el estado, que hubieran supuesto unas posibilidades más que razonables para el inmediato futuro de las cuentas del gobierno andaluz.
Todo eso está ahí y el gobierno andaluz anda por todos lados diciendo que sus actuaciones defiende a Andalucía, cuando hacen todo lo contrario, pero ¿era imprescindible anunciar la retirada de una subvención de un día para otro, sin provocar la rectificación necesaria?
En Iniciativa del Pueblo Andaluz creemos que cada día que pasa es más necesario un gobierno de progreso en Andalucía, que tenga bien claro que Andalucía se defiende pidiendo justicia social y actuando a favor de los que más lo necesitan. Las discusiones de barra de bar las dejamos para otra gente y nos centramos en lo importante, derechos a unos servicios públicos de calidad y universales y una suficiente financiación para Andalucía y su gente.